Las personas con enfermedad celíaca deben evitar el consumo de gluten, una proteína del trigo, el centeno y la cebada que puede desencadenar síntomas dolorosos en el intestino, impedir la absorción de nutrientes y aumentar el riesgo de otros problemas graves a largo plazo.

No hay tratamiento disponible para el trastorno autoinmune, que afecta aproximadamente al 1 por ciento de la población. Su tasa de aparición aproximadamente se ha duplicado en los últimos 25 años.
Un equipo interdisciplinario de investigadores médicos y de ingeniería con sede en McMaster, que incluye profesionales de EE. UU., Australia y Argentina, ha pasado seis años trabajando para desbloquear una pieza importante del rompecabezas en la búsqueda de una cura: cómo y dónde se produce la respuesta al gluten.
Anteriormente se pensaba que la respuesta inflamatoria al gluten ocurría dentro de la pared intestinal e involucraba exclusivamente a las células inmunes, pero en un nuevo artículo publicado el viernes en la revista Gastroenterology, los investigadores muestran que hay más en la historia.
Descubrieron que el revestimiento interno de la parte superior del intestino, llamado «epitelio», compuesto por una variedad de células que no forman parte clásicamente del sistema inmunológico, también desempeña un papel activo en la dirección de la respuesta inflamatoria al gluten.
Utilizando biomateriales microscópicos en el laboratorio, el equipo creó un modelo biológicamente funcional del epitelio intestinal que permitió a los investigadores aislar los efectos de moléculas específicas en las células epiteliales de personas con enfermedad celíaca. El modelo permitió a los investigadores generar y observar las reacciones en condiciones controladas, una opción que simplemente no está disponible en entornos intestinales extremadamente complejos de los seres vivos.
Pudieron observar cómo las moléculas alertan a las células inmunitarias de la presencia de gluten y concluir definitivamente que el epitelio desempeña un papel crucial en la activación del sistema inmunológico en la enfermedad celíaca.
Este mecanismo ya se había postulado antes, pero nunca se demostró. Se espera que responder a esta controvertida pregunta impulse el desarrollo de nuevos fármacos.
“La única forma en que podemos tratar la enfermedad celíaca hoy en día es eliminando por completo el gluten de la dieta. Esto es difícil de hacer y los expertos coinciden en que una dieta sin gluten es insuficiente”, dice Elena Verdú, autora correspondiente del artículo, profesora de gastroenterología y directora del Instituto de Investigación de Salud Digestiva Familiar Farncombe de McMaster.
Localizar con precisión la chispa de la respuesta inmune podría estimular la investigación sobre la administración de fármacos para inhibir esta función recién descubierta del epitelio, utilizando fármacos que ya se encuentran en ensayos clínicos, afirma Verdú.
«Esto nos permitió limitar la causa y el efecto específicos y demostrar exactamente si se produce la reacción y cómo», dice Tohid Didar, autor correspondiente del artículo y profesor asociado de la Escuela de Ingeniería Biomédica de McMaster, que posee el Centro de Investigación de Canadá. Cátedra de Nanobiomateriales.
Otro hallazgo importante del estudio es que después de detectar el gluten, el epitelio envía señales más fuertes a las células inmunitarias si también hay patógenos presentes.
Esto significa que en el futuro será posible detectar el patógeno en una persona con riesgo de desarrollar la enfermedad e inhibir las interacciones con el gluten y el epitelio intestinal para prevenir la enfermedad, afirma la autora principal del artículo, Sara Rahmani, PhD. Candidato en los laboratorios Verdú y Didar.
El estudio fue apoyado por una subvención de proyecto de los Institutos Canadienses de Investigación en Salud a Verdu, un premio Celiac Canada Dr. JA Campbell Young Investigator Award a Rahmani, y una NSERC Discovery Grant y un Ontario Early Researcher Award a Didar.
Fuente: https://brighterworld.mcmaster.ca/articles/celiac-origin-of-gluten-immune-reaction/
